Estos cambios comenzaron a discutirse en el 2017 y resultan clave para buscar un nuevo horizonte urbanístico y reducir el déficit habitacional en Antofagasta.
¿Qué es un Plano Regulador Comunal (PRC) ¿ Por qué es importante? Un PRC es una norma que dicta qué, dónde y cómo debe construirse en una comuna. Por lo tanto define alturas máximas, densidad de población, distancia entre edificios, áreas verdes, nuevas vías y usos de suelo, entre otros aspectos urbanísticos.
Un dato importante: si existe un proyecto o permiso que cumple con todas las normas dispuestas en el plano regulador, el municipio no puede negarse a dar la autorización correspondiente. Por ello, resulta necesario que el PRC presente un buen modelo de comuna para que las construcciones sean realizadas respetando la calidad de vida y el desarrollo armónico del territorio.
Antofagasta está en un proceso de actualización del Plan Regulador Comunal, que aún no finaliza, y que comenzó a tramitarse el 2017.
Como antecedente la última actualización de esta herramienta de planificación territorial se hizo hace 15 años, tiempo en que Antofagasta era muy distinta a lo que es hoy en día, con una población en constante aumento y crecimiento de la ciudad hacia los extremos.
El proceso de actualización se fija un horizonte al 2030. Entre sus alcances considera analizar: nuevo uso de suelo, permitiendo mayor cobertura comercial y residencial hacia el sector norte incorporando áreas verdes, escuelas y recintos hospitalarios; regular las zonas residenciales, industriales y evitar la contaminación de las empresas que están en el centro y otras áreas de la ciudad; e incluir un gran parque costero metropolitano en el borde costero de toda la ciudad, proyecto impulsado además por Creo Antofagasta.
Esto resulta clave a raíz que en 21% aumentó el déficit habitacional los últimos seis años en la región, pasando de 21 mil viviendas en 2014 a más de 25 mil el 2020, convirtiéndose en un serio problema en Antofagasta y Calama, principalmente.
Así lo determina un estudio elaborado por la Unidad de Estudios de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) Antofagasta, que recopila data histórica entre el los años 2006 y 2020 en materia de vivienda, concluyó además que, la vivienda en la comuna de Antofagasta es severamente inalcanzable para segmentos medios de la población debido a la poca oferta de viviendas menores a 2.500 UF, esto empujado principalmente por el valor de suelo y plano regulador desactualizado.
Además, el informe identifica 369 hectáreas disponibles para construcción de viviendas dentro del territorio operacional sanitario en la comuna de Antofagasta, las que podrían ser intervenidas mediante regeneración urbana, esto es aprovechando zonas consolidadas y hoy subutilizadas de la ciudad para el desarrollo de proyectos habitacionales que apunten a la reducción del déficit existente que supera las 25 mil viviendas.
Marcela Torres, presidenta CChC Antofagasta, manifestó que “la actualización del plan regulador comunal debe anticiparse proyectando el crecimiento de la población y sus respectivas necesidades urbanas en materia de espacio público, vivienda, movilidad y acceso a servicios. Esto se logra con un trabajo colaborativo donde todos los actores expertos más la ciudadanía, logren una visión común de la Antofagasta limpia, equilibrada y sostenible, que queremos dejarle a las futuras generaciones”.
Ordenamiento
Asimismo, el presidente del Comité Inmobiliario de CChC Antofagasta , Jorge Maturana, expresó que “el futuro plan regulador de la ciudad, si bien es un instrumento normativo, nos puede permitir a través de la participación ciudadana unificar una visión de ciudad que se desarrolle en los próximos 20 años. Es en esta visión que nuestros asociados pueden ser un gran aporte al desarrollo de una ciudad sustentable comprometiéndonos en lograr el equilibrio entre las necesidades ambientales, sociales y económicas”.
Sobre qué aspectos debería considerar el proceso de actualización del PRC, Maturana precisó que “sin lugar a dudas el nuevo plan regulador debería abordar fuertemente la movilidad, el espacio público y el ordenamiento de la industria, con el fin de liberar espacios centrales de la ciudad para lograr el desarrollo de barrios integrados que mejoran la calidad de vida de las personas”.
Agregó que “es necesario evaluar las barreras que hoy existen en la ciudad y que no permiten una continuidad y conexión entre los barrios. Un ejemplo de esto son los grandes espacios colindantes a la línea férrea, si bien el ferrocarril siempre ha jugado un rol importante tanto en la fundación como en el crecimiento de Antofagasta, hoy debe seguir colaborando en su desarrollo, permitiendo avanzar a modelos de movilidad y espacios públicos intermedios que hoy la ciudad requiere”.
En los primeros análisis del nuevo Plano Regulador Comunal, el expresidente de la CChC Antofagasta, Andrew Trench, explicó que los actuales problemas urbanos de la ciudad deben verse como oportunidades como ocurre con la franja del ferrocarril, donde es posible aplicar regeneración urbana, o con la necesidad urgente de contar con un transporte moderno donde la longitud de la ciudad más que un problema es una virtud si se generar un sistema de transporte integrado.
Destacó que en materia de calidad de vida urbana “la vivienda no es suficiente, la calidad de vida no está definida solamente por la vivienda, sino que además por todo su entorno”.
HISTORIA
Desde el primer Plan Regulador de Antofagasta (1965) se hace presente una idea de urbanismo moderno. Mostrando en esta una intención de lo que se quería como ciudad. La definición de dos conceptos descritos en este Plan Regulador de corte moderno como “Unidad Vecinal” y “Bloque Armónico”, explica Valeska Cerda en una publicación la actual jefa de Carrera de Arquitectura UCN.
En su análisis explicó que “esto nos lleva a reflexionar sobre la posibilidad que se sostuvo en la época, de aplicar en la planificación de una ciudad en pleno proceso de crecimiento, preceptos modernistas.
“Estos preceptos enunciados por Clarece Perry en el año 1923 y que buscaban humanizar la ciudad concretando las idea de “Zoning” y “NeighboardUnit”, desde la consolidación de una idea de vida barrial, que entre otras cosas describe un agrupamiento de una zona residencial en altura con bloques en orden abierto y que van configurando espacios libres o espacios públicos intermedios promoviendo la accesibilidad del peatón ”, precisó Cerda.
Reflexionó que “en la segunda versión del Plan Regulador de Antofagasta (1981), estos conceptos fueron derogados quedando solo estas ideas de ordenamiento en la Ley de Ordenanza y urbanismo bajo el concepto de “Conjunto Armónico”.